El teletrabajo trajo varios desafíos consigo, ya que el trabajar desde casa requiere diferentes herramientas y nuevas rutinas para hacerlo eficiente.

vía Endeavor


 

Y seguramente la experiencia ha sido distinta en las empresas; algunos celebrando los buenos resultados de esta modalidad y otros, luchando con las dificultades. Aun así, hay algo inevitable en trabajo remoto, que nos afecta a todos y sí, hace falta el contacto personal con los otros miembros del equipo.

Ya no hay encuentros espontáneos en la oficina, cafés o almuerzos compartidos, sino que todas las reuniones están programadas y planeadas. Eso puede causar sentirse más alejado de los compañeros de trabajo y, por ende, afectar la dinámica y la colaboración del equipo.

¿Sientes que eso pasa en tu empresa?

Acá te entregamos 8 consejos para gestionar y fortalecer equipos remotos, para poder enfrentar esta crisis todos unidos:

1. Establece un horario flexible y respétalo

Lo primero que hay que considerar al gestionar un equipo remoto, es que trabajando desde casa, se mezclan tanto las responsabilidades profesionales como los deberes personales en un sólo lugar, y que sobre todo para quienes hijos, puede ser un gran desafío.

Por lo tanto, es recomendable flexibilizar el horario y dar a todos los integrantes del equipo la libertad para utilizar ciertos horarios del día para cumplir con sus otros deberes o para realizar actividades que los hagan sentirse felices y saludables. Es recomendable avisar al equipo si estamos fuera por algunas horas y comentar cuando se vuelve a estar disponible, porque al final del día, es mucho más importante cumplir con las tareas que cumplir con un horario fijo.

2. Construye Confianza

Si bien al principio puede asustar dejar al equipo resolver sus tareas libremente y no supervisar, es importante demostrar confianza y, de esa manera, elevar el compromiso del equipo de trabajo. Además, es clave impulsar un ambiente donde todos los colaboradores confían en las habilidades de los demás, conocen el rol de cada uno y saben cómo apoyarse recíprocamente.

3. Establece objetivos comunes

Dejando bien claro el objetivo y propósito de la compañía. Comunica cómo cada persona puede contribuir a cumplirlo. Esto ayuda no solamente a fortalecer la identidad corporativa, sino también puede elevar la motivación y la colaboración del equipo.

4. Impulsa y gestiona bien la comunicación

La clave para mantener en buenos términos cualquier tipo de relación, sea con los clientes, proveedores, o compañeros de trabajo, es la comunicación. Y dado que en estos momentos gran parte de la comunicación es virtual, hay muchas herramientas que nos pueden ayudar a conversar, empezando con plataformas como Slack o Trello, donde podemos discutir ideas de trabajo, y por supuesto, los programas de videoconferencia como Zoom o Google Meet, que permiten no solamente escucharnos, sino también vernos.

Para poder contar con un equipo unido y conectado, hay que gestionar bien esos canales de comunicación y proporcionar un espacio de confianza, donde no solamente se pueda conversar de temas laborales sino también intercambiar sentimientos y pensamientos en esa situación tan particular.

5. Celebra los éxitos grupales

Cuando se cumplió una meta o algo salió bien en la empresa, lo mejor es compartirlo con todos, ya que, celebrando esos logros juntos, puede fortalecer el compañerismo. También, puede ser una buena oportunidad para agradecer a cada uno por su trabajo y compromiso.

6. Realiza reuniones periódicas dinámicas

Para realizar una reunión exitosa y beneficiosa para todos, es importante organizarla bien y enfocarla en el progreso del equipo. Ciertos rituales al comenzar y al cerrar la reunión, como dar feedback o hacer una ronda rápida donde todos los colaboradores cuentan en qué están trabajando por el momento, pueden ayudar a mantener los encuentros dinámicos y motivar a que todos participen.

7. Crea una cafetería virtual

Compartir las pequeñas pausas de café dentro de la rutina en la oficina, es una de las costumbres que fortalecen la relación entre los compañeros de trabajo. Esa instancia se pierde completamente con el trabajo remoto, pero gracias a la tecnología es posible crear un espacio informal alternativo. Por ejemplo, se pueden programar semanalmente cafés virtuales, con todo el grupo o dividiendo el equipo en varios grupos pequeños, donde todos se toman un tiempo para compartir informalmente y divertirse juntos.

 

8. Genera experiencias en conjunto

Como las oportunidades de compartir físicamente están muy limitadas, el sentimiento de pertenencia al equipo puede verse afectado. También aquí los medios digitales ofrecen buenas alternativas para mejorar ese aspecto y crear experiencias en conjunto. Por ejemplo, hay varias plataformas online, donde se puede jugar en equipo, con juegos clásicos o incluso de misterios para resolver en equipo. Puede sonar raro al principio jugar online con el equipo de trabajo, pero al final son esas instancias de descanso, donde los miembros se conectan con otros temas más allá de lo estrictamente laboral.

Existen miles de formas para interactuar virtualmente, como cursos de aprendizaje online grupales, encuentros donde cada miembro presenta algún tema de su interés tipo TED talk, asistir a un concierto de forma virtual o leer el mismo libro y conversar luego sobre esto. Hay que ser creativo y conocer bien a los integrantes del equipo para encontrar la interacción adecuada.

Implementar estas recomendaciones no solamente beneficiará a la cultura de la empresa, sino que también afectará positivamente el desarrollo personal de los colaboradores.